En un tazón chico mezcla la leche vegetal con la margarina y lleva al microondas por 1-2 minutos o hasta que la margarina se derrita. Bate hasta integrar ambos ingredientes por completo. Asegúrate de que la leche esté tibia y no caliente. Si está un poquito caliente, deja que baje su temperatura un poco (toca ligeramente con tu dedo hasta que se sienta tibia).
Espolvorea la levadura por encima. Deja reposar por 8-10 minutos para activar la levadura.
Posteriormente, añade el azúcar, la sal, y mezcla.
En un cuenco grande, agrega la harina y poco a poco vierte la mezcla anterior. Revuelve hasta obtener una masa pegajosa.
Espolvorea tu superficie de trabajo con harina y transfiere la masa a ésta. Amasa por 8-10 minutos hasta que ésta quede muy suave, pero no se pegue a tus manos. También, para saber si tu masa está lista, puedes picarla con tu dedo, y si la cavidad se va rellenando poco a poco, ya está lista para leudar.
Engrasa un tazón grande con un poco de aceite de oliva y coloca la masa en su interior. Cubre el tazón con una toalla de cocina y deja leudar la masa en un lugar cálido hasta que doble su tamaño (aproximadamente 1 hora).
Extrae la masa del tazón y divídela en 5 partes iguales (puedes pesarlas para que queden exactamente iguales). Bolea todas las porciones de masa y con un rodillo, extiende cada una en forma de óvalo, procura que no quede tan angosto.
Empezando un poquito arriba (2-3 cm) de la mitad del óvalo (a lo largo), comienza a hacer cortes, dejando poco espacio entre uno y otro.
Coloca un trozo de chocolate, que abarque ¾ partes de la parte superior (donde no hay cortes), dobla los lados y la parte de arriba para cubrir el chocolate. Comienza a enrollar hasta llegar al final del óvalo. Presiona ligeramente los costados y coloca en un molde desmontable engrasado, pegado a la orilla, formando una especie de corona.
Repite el mismo proceso con las otras 4 partes de masa. Poniendo cada rollito al lado del otro, pegados a la orilla del molde.
Cubre el molde con una toalla de cocina y deja leudar por 45-60 minutos en un lugar cálido.
Quince minutos antes de que los roles terminen de leudar, precalienta el horno a 175 °C.
Retira la toalla y barniza los rollitos con un poco de leche vegetal.
Hornea por 22 minutos en la parte media-alta del horno.
Extrae del horno y deja que alcance temperatura ambiente antes de comerlo.