En un tazón mediano, mezcla la harina, azúcar, levadura y sal.
En otro tazón mediano, mezcla la leche caliente con la margarina (70 g) y bate hasta derretir esta última. Añade el jugo de naranja, ralladura de naranja y vainilla.
Vacía la previa mezcla en el tazón de la harina y mezcla hasta que la masa comience a incorporarse.
Transfiere la masa a una superficie de trabajo enharinada y amasa por 8 minutos o hasta que la masa luzca ligeramente brillante, se sienta muy suave y ya no se te pegue a las manos.
Engrasa un tazón grande con un poco de aceite o margarina y coloca la masa dentro de éste. Cubre con un paño de cocina o un plato grande para generar un poco de calor y permita que la masa leude. Coloca el tazón en un lugar cálido y deja reposar por 1 hora.
Mientras la masa leuda, prepara la pasta de azúcar. En un tazón, tamiza el azúcar glass con la harina. Añade la margarina, vainilla y con ayuda de tus manos, mezcla hasta obtener una masa homogénea. Divide en 4 partes, aplánalas (como pequeños discos alargados) y reserva.
Extrae la masa del tazón y comienza a estirarla con tus manos como si fuera un rollo. Une las orillas haciendo un pequeño hueco en una de éstas e introduciendo la otra punta a dicho hueco. Sella los bordecitos para que se vea una rosca uniforme.
Coloca los discos de pasta de azúcar como lo prefieras, yo los coloqué en cada punto cardinal de la rosca (arriba, abajo, izquierda y derecha) y espolvorea un poco de azúcar morena en cada disco. Cubre la rosca con una toalla y deja reposar en un lugar cálido por 40 minutos más.
Quince minutos antes de que termine de reposar la rosca, precalienta el horno a 170°C.
Hornea la rosca por aproximadamente 35 minutos (debe lucir ligeramente dorada).
Retira del horno y deja enfriar antes de añadir la crema y el chocolate.
Transfiere la crema Biscoff o de cacahuate a una bolsa ziploc con un pequeño corte en la punta (igualmente con el chocolate derretido) y forma zigzags en los espacios de la rosca sin pasta de azúcar (como se muestra en el vídeo). Espolvorea un poco de galleta y nueces por encima (galleta para la crema y nueces para el chocolate).
Conserva la rosca en un contenedor hermético.
Al momento de comer un pedazo de rosca, te recomendamos recalentarlo por 15 segundos en el microondas para que esté extra suavecito.